lunes, 28 de junio de 2021

COMENTARIO AL EVANGELIO DEL 29 DE JUNIO. SOLEMNIDAD DE SAN PEDRO Y SAN PABLO

  Mt 16,13-19: Tú eres Pedro, y te daré las llaves del reino de los cielos.



En aquel tiempo, al llegar a la región de Cesarea de Filipo, Jesús preguntó a sus discípulos: 

-«¿Quién dice la gente que es el Hijo del hombre?» 

Ellos contestaron: 

-«Unos que Juan Bautista, otros que Elías, otros que Jeremías o uno de los profetas.» 

Él les preguntó: 

-«Y vosotros, ¿quién decís que soy yo?» 

Simón Pedro tomó la palabra y dijo: 

-«Tú eres el Mesías, el Hijo del Dios vivo.» 

Jesús le respondió:

-«¡Dichoso tú, Simón, hijo de Jonás!, porque eso no te lo ha revelado nadie de carne y hueso, sino mi Padre que está en el cielo. Ahora te digo yo: Tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia, y el poder del infierno no la derrotará. Te daré las llaves del reino de los cielos; lo que ates en la tierra quedará atado en el cielo, y lo que desates en la tierra quedará desatado en el cielo.»


Tú eres Pedro y te daré las llaves. Celebramos la solemnidad de San Pedro y San Pablo. El evangelio se centra en Pedro (Pablo no sale en el evangelio), en lo que solemos llamar en teología el primado de Pedro y el poder de las llaves.


Tener las llaves de una casa es tener el poder para entrar y salir cuando uno quiera. Pero también es una confianza y una responsabilidad grande.


Jesús confía toda su misión, todo su poder y toda su capacidad de decidir en Pedro. Está claro que no es un poder que se realice aislado, sino en unión muy profunda con Él. En un primer momento, meditemos brevemente sobre la grave responsabilidad que Jesús deja en los hombros de San Pedro. Es un día para pedir fuertemente por él, para que no sienta el peso de la responsabilidad sino sobretodo la confianza que pone Jesús en él. Confianza que se traduce también en facilidad de trato con el Señor.


Como dije antes, las llaves se utiliza para abrir y cerrar. Muchas veces en la Iglesia el poder de las llaves se utiliza sobre todo para cerrar: determinar el dogma, determinar las enseñanzas que son contrarias a la fe cristiana, excomulgar, etc. 

En varias ocasiones el Papa Francisco ha pedido que la Iglesia no sea una aduana, sino un hospital de campaña. Ha puesto a toda la Iglesia en estado de misión para salir a comunicar la vida nueva en Cristo. En general, son lenguajes que evocan más a abrir puertas que a cerrarlas. En un momento como éste, se pide tomar decisiones, elecciones, sobre los distintos temas de calado por los cuales está pasando la Iglesia. Pidamos para que el Papa sienta nuestra oración y no se vea solo, sino a toda la Iglesia orando por su ministerio. Para que siga imprimiendo en la Iglesia (nosotros) una actitud abierta, dialogante, de comunión con el mundo y con todas las distintas tradiciones. Algunas veces, el Papa abre puertas, y nosotros las cerramos. 

Pidamos también para que las llaves se usan para abrir más que para cerrar.