domingo, 14 de marzo de 2021

VIGILIA MISIONERA DEL MES DE MARZO

VIGILIA MISIONERA DE MARZO



Dios es fiel


Dios es fiel, guarda siempre su Alianza,

libra al pueblo de toda esclavitud.

Su Palabra resuena en los profetas

reclamando el bien y la virtud.


Pueblo en marcha por el desierto ardiente:

horizontes de paz y libertad.

Asamblea de Dios eterna fiesta;

tierra nueva perenne heredad.


Si al mirar hacia atrás somos tentados

de volver a Egipto seductor,

el Espíritu empuja con su fuerza

a avanzar por la vía del amor.


El maná es un don que el cielo envía,

pero el pan hoy se cuece con sudor.

Leche y miel nos dará la tierra nueva

si el trabajo es fecundo y redentor.


Y Jesús nos dará en el Calvario

su lección: «Hágase tu voluntad».

Y su sangre, vertida por nosotros,

será el precio de nuestra libertad.


SALMO 135 (a dos coros)


Ant: Dad gracias al Señor, porque es eterna su misericordia.



Dad gracias al Señor porque es bueno:

porque es eterna su misericordia.


Dad gracias al Dios de los dioses:

porque es eterna su misericordia.


Dad gracias al Señor de los señores:

porque es eterna su misericordia.


Sólo él hizo grandes maravillas:

porque es eterna su misericordia.


Él hizo sabiamente los cielos:

porque es eterna su misericordia.


Él afianzó sobre las aguas la tierra:

porque es eterna su misericordia.


Él hizo lumbreras gigantes:

porque es eterna su misericordia.


El sol que gobierna el día:

porque es eterna su misericordia.


La luna que gobierna la noche:

porque es eterna su misericordia.


Él hirió a Egipto en sus primogénitos:

porque es eterna su misericordia.


Y sacó a Israel de aquel país:

porque es eterna su misericordia.


Con mano poderosa, con brazo extendido:

porque es eterna su misericordia.


Él dividió en dos partes el mar Rojo:

porque es eterna su misericordia.


Y condujo por en medio a Israel:

porque es eterna su misericordia.


Arrojó en el mar Rojo al faraón:

porque es eterna su misericordia.


Guió por el desierto a su pueblo:

porque es eterna su misericordia.


Él hirió a reyes famosos:

porque es eterna su misericordia.


Dio muerte a reyes poderosos:

porque es eterna su misericordia.


A Sijón, rey de los amorreos:

porque es eterna su misericordia.


Y a Hog, rey de Basán:

porque es eterna su misericordia.


Les dió su tierra en heredad:

porque es eterna su misericordia.


En heredad a Israel su siervo:

porque es eterna su misericordia.


En nuestra humillación, se acordó de nosotros:

porque es eterna su misericordia.


Y nos libró de nuestros opresores:

porque es eterna su misericordia.


Él da alimento a todo viviente:

porque es eterna su misericordia.


Dad gracias al Dios del cielo:

porque es eterna su misericordia.


Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.

Como era en el principio, ahora y siempre,

por los siglos de los siglos. Amén.


Ant: Dad gracias al Señor, porque es eterna su misericordia.


CANTO “Misericordia quiero y no sacrificios” 


Lectura bíblica


Rm 12,1-2


Os exhorto hermanos, por la misericordia de Dios, a presentar vuestros cuerpos como hostia viva, santa, agradable a Dios; éste es vuestro culto razonable. Y no os ajustéis a este mundo, sino transformaos por la renovación de la mente, para que sepáis discernir lo que es voluntad de Dios, lo bueno, lo que le agrada, lo perfecto.Pero, cuando se fue, empezó a divulgar el hecho con grandes ponderaciones, de modo que Jesús ya no podía entrar abiertamente en ningún pueblo; se quedaba fuera, en descampado; y aun así acudían a él de todas partes.


Reflexión a cargo de Fernando López y su equipo


CANTO Ixcis “El ayuno que yo quiero”


Magnificat


Proclama mi alma la grandeza del Señor,

se alegra mi espíritu en Dios, mi salvador;

porque ha mirado la humillación de su esclava.


Desde ahora me felicitarán todas las generaciones,

porque el Poderoso ha hecho obras grandes por mí:

su nombre es santo,

y su misericordia llega a sus fieles

de generación en generación.


Él hace proezas con su brazo:

dispersa a los soberbios de corazón,

derriba del trono a los poderosos

y enaltece a los humildes,

a los hambrientos los colma de bienes

y a los ricos los despide vacíos.


Auxilia a Israel, su siervo,

acordándose de la misericordia

-como lo había prometido a nuestros padres-

en favor de Abrahán y su descendencia por siempre.


Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.

Como era en el principio, ahora y siempre,

por los siglos de los siglos. Amén.


PETICIONES


  • Te bendecimos, Señor, a ti que, por tu sangre preciosa, nos has redimido de la esclavitud; haz que participemos en la gloriosa libertad de los hijos de Dios.
  • Ayuda con tu gracia a nuestro obispo Bernardo y a todos los obispos de la Iglesia, para que, con gozo y fervor, administren tus misterios.
  • Que todos los que consagran su vida a la investigación de la verdad la hallen y, hallándola, se esfuercen en buscarla con mayor plenitud.
  • Atiende, Señor, a los huérfanos, a las viudas, a los que viven abandonados, para que te sientan cercano y se entreguen más a ti.
  • Acoge a nuestros hermanos difuntos en la ciudad santa de la Jerusalén celestial, donde tú, junto con el Padre y el Espíritu Santo, lo serás todo para todos.
  • Por la Misión diocesana en todas las parroquias y para que los cristianos, llenos del amor de Dios salgamos a anunciar a Cristo con nuestra vida y donde vivimos.
  • Por los cristianos perseguidos en tantos lugares, para que nuestra oración sea su fuerza.
  • Por el proyecto de los Mártires de Tazacorte, por las personas que van a ir y por los lugares donde van a estar, por su situación, sus gentes.


ORACIÓN DE LOS MÁRTIRES


Oh Dios, que otorgaste una constancia invencible en la fe a los bienaventurados Ignacio de Azevedo y Compañeros mártires, te rogamos nos concedas que, robustecidos con tan sublimes ejemplos, imitemos el amor de su caridad y podamos participar su gloria en el cielo. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén


RESERVA DEL SANTÍSIMO


CANTO (Himno de la misión)


Cristo nos convoca a ser feliz, compartiendo vida, la fe y la amistad. Él nos alimenta con su Palabra y nos nutre con su Pan. Él es quien nos primerea, impregnando con su olor, en salida misionera…Vamos repartiendo amor, repartiendo amor…

SOMOS UNA IGLESIA EN SALIDA. VAMOS COMPARTIENDO LA VIDA. SOMOS SIGNOS DE RESURRECCIÓN. SOMOS UNA IGLESIA EN SALIDA. VAMOS COMPARTIENDO LA VIDA. SOMOS SIGNOS DEL AMOR DE DIOS.

A las periferias tenemos que ir a acompañar a hermanos que estén por allí, matando el egoísmo en nuestro interior y así fructificar. Él es nuestra fiesta, impulso y ardor, armaremos lío…vamos repartiendo amor, repartiendo amor…