miércoles, 25 de octubre de 2023

HOJA PARROQUIAL. DOMINGO XXX DEL TIEMPO ORDINARIO. CICLO A.

 






La ley es el AMOR




HOJA PARROQUIAL

28 y 29 de Octubre de 2023
Domingo XXX del Tiempo Ordinario. Ciclo A

Parroquias de Tazacorte y Ntra. Sra. de Fátima Tijarafe

Textos tomados de la página web de acción católica. Dibujo obra de Fano



" Amaras al Señor tú Dios con todo tu corazón"


• Jesús se encuentra en un ambiente de confrontación, que es muy útil para nosotros porque en esos encuentros deja claras muchas cosas, son clarificadores. Hoy Jesús forzado por el experto en la Ley nos muestra cuál es el mandamiento principal, cuál es nuestra principal obligación. Jesús lo resume en el AMOR. Amor a Dios (37) y amor a los demás (39). 

• La respuesta de Jesús al entendido en la Ley para nosotros que hemos crecido dentro de la cultura religiosa cristiana es posible que la veamos como algo normal. No lo era tanto dentro del judaísmo donde existían 365 mandamientos negativos y 248 positivos. Dentro de ese bosque de mandamientos ¿cuál era el más importante?, ¿todo valía lo mismo? Dentro de esa maraña de leyes ¿cuál era el mandamiento principal? 

• Esta era una preocupación para muchos buenos judíos. Jesús de entre los 613 mandamientos que tenían que saber y practicar escoge estos dos que a la hora de la verdad se resume en uno: AMAR. Por ello, a la hora de la verdad, deberíamos estar muy agradecidos al experto en la ley por la pregunta que le hace a Jesús y por tanto por la respuesta que Jesús le da.

• Para Jesús la primera obligación de todo ser humano es amar a Dios. Amar a Dios que no es sólo no blasfemar o participar en las celebraciones religiosas… Amar a Dios es querer lo que Dios quiere, es cumplir su voluntad, hacer lo que Él quiere. El texto dice: “Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente” (37), para amar de verdad se requiere a un amor íntegro, total, incondicional. Es el absoluto de Dios que pide a los creyentes un amor total, sin límites. 

• La originalidad de Jesús no está en este primer mandamiento que los judíos piadosos ya recitaban dos veces al día en su oración, la “Shemá”, “Escucha, Israel: El Señor es nuestro Dios, el Señor es uno solo. Amarás, pues, al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma y con todas tus fuerzas” (Dt. 6, 4-5). La novedad de Jesús se encuentra sobre todo en la segunda parte de la respuesta en la que establece una relación de semejanza entre el primer y el segundo mandamiento (39).
 
• Así dice Jesús: el segundo mandamiento es: “amar a tu prójimo como a ti mismo”. Jesús sitúa el segundo mandamiento al nivel del primero. De dos mandamientos Jesús hace uno y nos da la pauta, la manera de cómo hemos de estimar al prójimo: como nos estimamos a nosotros mismos. 

• Por otra parte el propone una amor desinteresado, que no busca recompensa alguna y por último el amor que Jesús propone es un amor ilimitado, un amor, como decimos, hasta la última gota. 

• Para Jesús en el amor a Dios y al prójimo encontramos la síntesis de toda la revelación divina, ahí está la identidad cristiana. Con razón San Juan de la Cruz nos dice que “al atardecer de la vida te examinarán en el amor”. Y según Jesús así nos lo describe en la parábola del juicio final: “Venid benditos de mi Padre, porque tuve hambre y me distéis de comer…” (Mt 25, 35).





              LECTURAS


Primera lectura del libro del Éxodo 22, 20-26 

Esto dice el Señor:
«No maltratarás ni oprimirás al emigrante, pues emigrantes fuisteis vosotros en la tierra de Egipto.
No explotarás a viudas ni a huérfanos. Si los explotas y gritan a mí, yo escucharé su clamor, se encenderá mi ira y os mataré a espada; vuestras mujeres quedarán viudas y vuestros hijos huérfanos.
Si prestas dinero a alguien de mi pueblo, a un pobre que habita contigo, no serás con él un usurero cargándole intereses.
Si tomas en prenda el manto de tu prójimo, se lo devolverás antes de ponerse el sol, porque no tiene otro vestido para cubrir su cuerpo, ¿y dónde, si no, se va a acostar? Si grita a mí, yo lo escucharé, porque yo soy compasivo».

Salmo 17, 2-3a. 3bc-4. 47 y 51ab R/. Yo te amo, Señor; tú eres mi fortaleza

Yo te amo, Señor; tú eres mi fortaleza;
Señor, mi roca, mi alcázar, mi libertador. R/.

Dios mío, peña mía, refugio mío,
escudo mío, mi fuerza salvadora, mi baluarte.
Invoco al Señor de mi alabanza
y quedo libre de mis enemigos. R/.

Viva el Señor, bendita sea mi Roca,
sea ensalzado mi Dios y Salvador.
Tú diste gran victoria a tu rey,
tuviste misericordia de tu ungido. R/.


Segunda lectura de la Primera Carta del Apóstol San Pablo a los Tesalonicenses 1, 5c-10

Hermanos:
Sabéis cómo nos comportamos entre vosotros para vuestro bien. Y vosotros seguisteis nuestro ejemplo y el del Señor, acogiendo la Palabra en medio de una gran tribulación, con la alegría del Espíritu Santo. Así llegasteis a ser un modelo para todos los creyentes de Macedonia y de Acaya.
No solo ha resonado la palabra del Señor en Macedonia y en Acaya desde vuestra comunidad, sino que además vuestra fe en Dios se ha difundido por doquier, de modo que nosotros no teníamos necesidad de explicar nada, ya que ellos mismos cuentan los detalles de la visita que os hicimos: cómo os convertisteis a Dios, abandonando los ídolos, para servir al Dios vivo y verdadero, y vivir aguardando la vuelta de su Hijo Jesús desde el cielo, a quien ha resucitado de entre los muertos y que nos libra del castigo futuro.

Evangelio Según San Mateo 22, 34-40

En aquel tiempo, los fariseos, al oír que Jesús había hecho callar a los saduceos, se reunieron en un lugar y uno de ellos, un doctor de la ley, le preguntó para ponerlo a prueba:
«Maestro, ¿cuál es el mandamiento principal de la ley?».
Él le dijo:
«“Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente”.
Este mandamiento es el principal y primero. El segundo es semejante a él:
“Amarás a tu prójimo como a ti mismo”.
En estos dos mandamientos se sostienen toda la Ley y los Profetas».


4. Próximos Pasos

98. Mirar al futuro del proceso sinodal requiere considerar dos horizontes temporales muy diferentes. El primero es el horizonte a largo plazo, en el que la sinodalidad toma la forma de una perenne llamada a la conversión personal y a la reforma de la Iglesia. La segunda, claramente al servicio de la primera, es la que centra nuestra atención en los encuentros de la Etapa Continental que estamos viviendo.
4.1 Un camino de Conversión y reforma 
99. En las síntesis, el Pueblo de Dios expresa el deseo de ser menos una Iglesia de mantenimiento y conservación, y más una Iglesia misionera. Surge un vínculo entre el incremento de la comunión a través de la participación y el fortalecimiento del compromiso con la misión: la sinodalidad conduce a la renovación misionera. Como dice la síntesis de España: «consideramos que la comunión ha de conducirnos a un estado permanente de misión: encontrarnos, escucharnos, dialogar, reflexionar, discernir juntos son acciones con efectos positivos en sí mismas, pero no se entienden si no es con el fin de impulsarnos a salir de nosotros y de nuestras comunidades de referencia para la realización de la misión que tenemos encomendada como Iglesia» (CE España). 
100. El Pueblo de Dios ha experimentado la alegría de caminar juntos y el deseo de seguir haciéndolo. El modo de conseguirlo como una comunidad católica verdaderamente global es algo que todavía está por descubrirse del todo: «caminar de un modo sinodal, escuchándose recíprocamente, participando en la misión y comprometiéndose en el diálogo, tiene probablemente una dimensión de “ya y todavía no”: está presente, pero todavía queda mucho por hacer. Los laicos son capaces, están llenos de talentos y se muestran dispuestos a contribuir cada vez más, siempre que se les den oportunidades para hacerlo. Las investigaciones y estudios adicionales a nivel parroquial pueden abrir otras vías en las que la contribución de los laicos puede ser inmensa y el resultado sería una Iglesia más vibrante y floreciente, que es el objetivo de la sinodalidad» (CE Namibia). Somos una Iglesia que aprende, y para ello necesitamos un discernimiento continuo que nos ayude a leer juntos la Palabra de Dios y los signos de los tiempos, para proceder en la dirección que el Espíritu nos señala.
101. Al mismo tiempo, caminar juntos como Pueblo de Dios requiere que reconozcamos la necesidad de una conversión continua, individual y comunitaria. En el plano institucional y pastoral, esta conversión se traduce en una reforma igualmente permanente de la Iglesia, de sus estructuras y de su estilo, siguiendo las huellas del impulso al aggiornamento continuo, legado precioso que nos ha dejado el Concilio Vaticano II, al que estamos llamados a mirar mientras celebramos su 60º aniversario. 
102. En el camino de conversión y reforma, nos apoyamos en los dones que hemos recibido durante el primer año del proceso sinodal, a partir de la contemplación de lo que Jesús nos muestra continuamente en los Evangelios: la atención libre y gratuita al otro, que está en la base de la escucha, no es un recurso limitado que hay que guardar celosamente, sino una fuente desbordante que no se agota, sino que crece cuanto más se recurre a ella. La escucha y el diálogo son el camino para acceder a los dones que el Espíritu nos ofrece a través de la variedad multiforme de la única Iglesia: carismas, vocaciones, talentos, habilidades, lenguas y culturas, tradiciones espirituales y teológicas, diferentes formas de celebrar y dar gracias. Las síntesis no piden uniformidad, sino que aprendamos a crecer en una sincera armonía que ayude a los creyentes a cumplir su misión en el mundo, creando los vínculos necesarios para caminar juntos con alegría. 
103. El mensaje del Sínodo es sencillo: estamos aprendiendo a caminar juntos y a sentarnos juntos para partir el único pan, para que cada uno y cada una encuentre su lugar. Todos están llamados a participar en este viaje, nadie está excluido. Nos sentimos llamados a ello para poder anunciar de forma creíble el Evangelio de Jesús a todos los pueblos. Este es el camino que pretendemos seguir en la Etapa Continental.




viernes, 20 de octubre de 2023

JORNADA DE ORACIÓN, AYUNO Y PENITENCIA, POR LA PAZ EN EL MUNDO. ESPECIALMENTE EN ISRAEL Y PALESTINA

 El Próximo Viernes 27, Jornada de Oración, Ayuno y Penitencia por la Paz en el mundo, especialmente en Israel y Palestina 



miércoles, 18 de octubre de 2023

HOJA PARROQUIAL. DOMINGO XXIX DEL TIEMPO ORDINARIO. CICLO A

 





El Evangelio funciona con Amor y no con Dinero










HOJA PARROQUIAL

21 y 22 de octubre del 2023.
Domingo XXIX del Tiempo Ordinario. Ciclo A

Parroquias de Tazacorte y Ntra. Sra. de Fátima Tijarafe

textos tomados de la página web de Acción Católica. Dibujo Obra de Fano.


"Dad al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios"


• Nos encontramos con un texto de confrontación entre los fariseos, los herodianos y Jesús, que viene a plantearnos una cuestión importante ¿cómo conjugar la dimensión sociopolítica de la vida con la fe y la religión? 
• La vida de Jesús, de vez en cuando, estuvo salpicada, más aún ambientada, con toda una serie de confrontaciones, de tensiones. Por nada del mundo su vida pública fue placentera. Por eso su muerte violenta fue el resultado de una vida tensa. 
• Para empezar en el relato le hacen a Jesús el parabién. Toda una serie de alabanzas que se ve que son falsas y que esconden una gran falacia (16). 
• Los fariseos eran contrarios a la ocupación romana y juntamente con los herodianos se acercan a Jesús para ponerle una trampa, una pregunta de doble filo: “¿es lícito pagar impuesto al César o no?” (17).
 • Con esta pregunta pretendían hacer caer en la trampa a Jesús. Si respondía que no era lícito se ponía directamente en contra del César, mostraba una posición anti-romana, dando razón a los zelotes. Si decía que era lícito pagar el tributo, Jesús venía a aceptar la autoridad divina del emperador y se situaba en contra de los intereses de su pueblo, el pueblo judío. Con ello se hacía impopular. 
• Jesús se escapa inteligentemente de la trampa que le habían puesto y con su postura viene a rechazar ese enfrentamiento: César-Dios (18). La respuesta de Jesús es astuta. No niega el aspecto económico y político. “dad al César lo que es del César” (21) pero lo relativiza. No se pueden absolutizar los aspectos cívicos, políticos…
• Pocas frases del Evangelio han sido y son tan citadas como esta, aunque no siempre dándole el mismo sentido. 
• Según Jesús, estas dos realidades no se sitúan en le mismo nivel: Dios está por encima de todo, Dios es el único Señor.
 • Jesús viene a decir lo que dirá en otra ocasión “mi Reino no es de este mundo” (Jn 18, 36). • Dios lo que Él quiere es el bien de la persona, el respeto a su dignidad, el avance de su Proyecto, del Reino. Dios quiere que transformemos este mundo según su Proyecto, según lo que Jesús nos muestra en toda su vida “a Dios lo que es de Dios” (21). 
• A veces se ha pretendido identificar los dos ámbitos el político y el religioso, en otras ocasiones se ha sacralizado el poder político o se ha politizado la misión de la Iglesia. Ahora en la mayoría de las naciones se trabaja por una separación de los dos ámbitos. 
• Continúa siendo difícil compaginar armónicamente el deber al César y el deber a Dios, ser buenos ciudadanos y buenos cristianos. Lo ha sido muchas veces. Por eso en la historia de la Iglesia ha habido, en ciertas épocas, muchos mártires, porque hubo personas que no claudicaron y prefirieron la fidelidad a Dios al César del momento.
 • No hemos de descuidar la dimensión humana y social, nuestro bienestar y el progreso del mundo. Pero tampoco hemos de olvidar la dimensión religiosa del ser humano, su apertura a Dios con todo lo que ello supone. Cuando los planteamientos del César se oponen al Proyecto de Dios está claro que la preferencia ha de mantenerse en la fidelidad a Dios.





              LECTURAS


Primera Lectura del libro de Isaías 45,1. 4-6

Esto dice el Señor a su Ungido, a Ciro:
«Yo lo he tomado de la mano,
para doblegar ante él las naciones
y desarmar a los reyes,
para abrir ante él las puertas,
para que los portales no se cierren.
Por mi siervo Jacob,
por mi escogido Israel,
te llamé por tu nombre,
te di un título de honor,
aunque no me conocías.
Yo soy el Señor y no hay otro;
fuera de mí no hay dios.
Te pongo el cinturón,
aunque no me conoces,
para que sepan de Oriente a Occidente
que no hay otro fuera de mí.
Yo soy el Señor y no hay otro».

Salmo 95, 1 y 3. 4-5. 7-8a. 9-10ac R/. Aclamad la gloria y el poder del Señor 

Cantad al Señor un cántico nuevo,
cantad al Señor, toda la tierra.
Contad a los pueblos su gloria,
sus maravillas a todas las naciones.
R/.


Porque es grande el Señor,
y muy digno de alabanza,
más temible que todos los dioses.
Pues los dioses de los gentiles no son nada,
mientras que el Señor ha hecho el cielo.
R/.


Familias de los pueblos, aclamad al Señor,
aclamad la gloria y el poder del Señor,
aclamad la gloria del nombre del Señor,
entrad en sus atrios trayéndole ofrendas. R/.



Postraos ante el Señor en el atrio sagrado,
tiemble en su presencia la tierra toda.
Decid a los pueblos: «El Señor es rey,
él gobierna a los pueblos rectamente». R/.


ANTIFONA CANTADA DEL SALMO. PINCHANDO EN ESTE ENLACE



Segunda lectura de la primera carta del apóstol San Pablo a los Tesalonicenses 1, 1-5b 

Pablo, Silvano y Timoteo a la Iglesia de los Tesalonicenses, en Dios Padre y en el Señor Jesucristo. A vosotros, gracia y paz.
En todo momento damos gracias a Dios por todos vosotros y os tenemos presentes en nuestras oraciones, pues sin cesar recordamos ante Dios, nuestro Padre, la actividad de vuestra fe, el esfuerzo de vuestro amor y la firmeza de vuestra esperanza en Jesucristo nuestro Señor.
Bien sabemos, hermanos amados de Dios, que él os ha elegido, pues cuando os anuncié nuestro evangelio, no fue solo de palabra, sino también con la fuerza del Espíritu Santo y con plena convicción.

Evangelio Según San Mateo 22,15-21

En aquel tiempo, se retiraron los fariseos y llegaron a un acuerdo para comprometer a Jesús con una pregunta.
Le enviaron algunos discípulos suyos, con unos herodianos, y le dijeron:
«Maestro, sabemos que eres sincero y que enseñas el camino de Dios conforme a la verdad, sin que te importe nadie, porque no te fijas en apariencias. Dinos, pues, qué opinas:
¿es lícito pagar impuesto al César o no?».
Comprendiendo su mala voluntad, les dijo Jesús:
«Hipócritas, ¿por qué me tentáis? Enseñadme la moneda del impuesto».
Le presentaron un denario.
Él les preguntó:
«De quién son esta imagen y esta inscripción?».
Le respondieron:
«Del César».
Entonces les replicó:
«Pues dad al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios».



3. Hacia una Iglesia sinodal misionera

3.5 Vida Sinodal y liturgia
Celebrar con estilo Sinodal
95. Al mismo tiempo, el proceso sinodal ha representado una oportunidad para experimentar de nuevo la diversidad de formas de oración y celebración, acrecentando el deseo de hacerla más accesible a la vida ordinaria de las comunidades. La síntesis francesa da voz a tres aspiraciones: «la primera [...] se refiere a la diversificación de las liturgias en beneficio de las celebraciones de la Palabra, es decir, momentos de oración que pongan en el centro la meditación de textos bíblicos. La segunda, menos frecuente, recuerda la importancia de las peregrinaciones y la piedad popular. La tercera desea una formación litúrgica renovada, para hacer frente a un problema denunciado por muchas síntesis, a saber, la incomprensibilidad del lenguaje que normalmente usa la Iglesia» (CE Francia). Algunas regiones plantean la cuestión de la reforma de la liturgia, incluso en las Iglesias orientales, donde está profundamente ligada a la identidad de la Iglesia: «En nuestra Iglesia, es oportuna una reforma litúrgica, para releer a la luz del Espíritu Santo la acción y la participación del Pueblo de Dios en la obra de Dios en nuestro tiempo» (Iglesia greco-melquita). 
96. Muchas Iglesias subrayan también la importancia de hacer habituales los vínculos de la celebración auténtica y propia con las diversas formas de intercambio dialógico y de convivencia fraterna. «La convivialidad y la fraternidad siempre formaron parte de la experiencia [de las reuniones sinodales]. En todas las reuniones, desde la inicial hasta las posteriores consultas en las parroquias y estructuras pastorales, hubo salu-salo (compartir de la comida). Muchos destacaron cómo las reuniones [sinodales] influyeron positivamente en la celebración de las liturgias» (CE Filipinas). 
97. La variedad de tradiciones rituales de la oración litúrgica, así como las formas simbólicas con las que se expresan las diferentes culturas, es considerada por todos como una riqueza. Un renovado amor por la espiritualidad y el compromiso de cuidar la belleza y el estilo sinodal de la celebración apoyan el resplandor de una Iglesia misionera: «todos los informes hablan de las celebraciones como espacios que pueden inspirar y ayudar a vivir la fe en nuestra vida personal, familiar, laboral, en el barrio y la misma comunidad» (CE Uruguay).  









Exequias de Matilde

 


domingo, 15 de octubre de 2023

JORNADA DE AYUNO Y ORACIÓN POR LA PAZ EN ISRAEL Y PALESTINA

 El martes 17 de Octubre todos los Cristianos estamos convocados a una Jornada de Oración y Ayuno por la Paz especialmente en Israel y Palestina 


Colabora con la Limpieza de tu Parroquia

 


miércoles, 11 de octubre de 2023

HOJA PARROQUIAL. DOMINGO XXVIII DEL TIEMPO ORDINARIO. CICLO A


 





Jesús te invita a una fiesta, no les des la espalda





  HOJA PARROQUIAL

14 y 15 de octubre del 2023
Domingo XXVIII del Tiempo Ordinario. Ciclo A


Parroquias de Tazacorte y Ntra. Sra. de Fátima en Tijarafe

textos tomados de la pagina web de acción católica en España. Dibujo obra de Fano 


"A todos los que encontréis, llamadlos a la boda"


• Una vez más Jesús utiliza una parábola para hablarnos del Reino de Dios, del Proyecto de Dios.

 • En el relato aparecen dos parábolas: la de los convidados al banquete (2) y la del vestido que no está a tono con la fiesta (11). 

• En esta ocasión Jesús toma la imagen de un banquete, de una fiesta, para mostrarnos lo que es el Reino de Dios. Con lo que de entrada nos está diciendo que el Proyecto de Dios es algo bonito y muy beneficioso para el ser humano.
 
• El profeta Isaías también utiliza la imagen de un banquete: “Preparará el Señor de los ejércitos para todos los pueblos, en este monte, un festín de manjares suculentos, un festín de vinos de solera, manjares enjundiosos, vinos onerosos…” (Is 25, 6).
 
• Para empezar, hay que decir que una de las ideas centrales del mensaje de la parábola es anunciarnos que el Proyecto de Dios, el Reino, es como una fiesta y Dios quiere que todos podamos participar en el gozo de la vida, en la alegría de convivir con los otros, que seamos felices de verdad. La invitación de Dios es una invitación a la vida, a la esperanza.
 
• Cabria preguntarnos si nos lo creemos y sobre todo si lo vivimos así. También sería interesante ver ¿si los demás nos perciben a los cristianos como invitados a la fiesta o si por el contrario lo nuestro da la impresión de que es un camino de renuncias, de sufrimientos, de lamentaciones? 

• Por otra parte la parábola del vestido de boda puede tener aplicaciones directas a nosotros los cristianos, los que hemos aceptado participar en el banquete, pero eso no es suficiente. Hay que vivir (actitudes, planteamientos, prioridades, etc.) a tono con el Proyecto de Jesús, eso es lo que hace referencia al vestido (12). La invitación es gratuita pero el estilo de vida ha de estar a tono con el Reino. Estamos, pues, llamados a ser coherentes, con el lugar donde nos encontramos, con el Proyecto de Dios.
 
• En la parábola por dos veces el rey, que representa a Dios, envía a sus criados, que son los profetas, para que recuerden a los invitados, los judíos, que el banquete de su Hijo, Jesús, ya está totalmente preparado (3.9). Pero los invitados prefieren sus cosas (5), incluso actúan pésimamente con los criados del rey (6). No responden positivamente a la invitación. Ante la negativa de los primeros invitados el rey no retrocede, el banquete se realizará y para ello las puertas del banquete se abren para todo el mundo: judíos y paganos… todos somos invitados a participar en la fiesta (10). 

• No miremos por el retrovisor, apliquémonos el cuento. Esta parábola está dicha también para nosotros, como todas las demás.


FOTO DE FANO EN ESTE ENLACE



                LECTURAS


 Primera lectura del libro de Isaías 25, 6-10a

Preparará el Señor del universo para todos los pueblos, en este monte, un festín de manjares suculentos, un festín de vinos de solera; manjares exquisitos, vinos refinados.

Y arrancará en este monte el velo que cubre a todos los pueblos, el lienzo extendido sobre todas las naciones.

Aniquilará la muerte para siempre.

Dios, el Señor, enjugará las lágrimas de todos los rostros, y alejará del país el oprobio de su pueblo - lo ha dicho el Señor -.

Aquel día se dirá: «Aquí está nuestro Dios. Esperábamos en él y nos ha salvado. Este es el Señor en quien esperamos. Celebremos y gocemos con su salvación, porque reposará sobre este monte la mano del Señor».

Salmo 22, 1-3a. 3b-4. 5. 6. R/.Habitaré en la casa del Señor por años sin término

El Señor es mi pastor, nada me falta:
en verdes praderas me hace recostar;
me conduce hacia fuentes tranquilas
y repara mis fuerzas. R/.

Me guía por el sendero justo,
por el honor de su nombre.
Aunque camine por cañadas oscuras,
nada temo, porque tú vas conmigo:
tu vara y tu cayado me sosiegan. R/.

Preparas una mesa ante mí,
enfrente de mis enemigos;
me unges la cabeza con perfume,
y mi copa rebosa. R/.

Tu bondad y tu misericordia me acompañan
todos los días de mi vida,
y habitaré en la casa del Señor
por años sin término. R/.

ANTIFONA CANTADA DEL SALMO. PINCHANDO AQUÍ

Segunda lectura. de la Carta del Apóstol San Pablo a los Filipenses 4, 12-14. 19-20

Hermanos:
Sé vivir en pobreza y abundancia. Estoy avezado en todo y para todo: a la hartura y al hambre, a la abundancia y a la privación. Todo lo puedo en aquel que me conforta. En todo caso, hicisteis bien en compartir mis tribulaciones.

En pago, mi Dios proveerá a todas vuestras necesidades con magnificencia, conforme a su riqueza en Cristo Jesús.

A Dios, nuestro Padre, la gloria por los siglos de los siglos. Amén. 

Evangelio. Según San Mateo. 22,1-14

En aquel tiempo, volvió a hablar Jesús en parábolas a los sumos sacerdotes y a los ancianos del pueblo, diciendo:

«El reino de los cielos se parece a un rey que celebraba la boda de su hijo; mandó a sus criados para que llamaran a los convidados, pero no quisieron ir. Volvió a mandar otros criados encargándoles que dijeran a los convidados:

“Tengo preparado el banquete, he matado terneros y reses cebadas y todo está a punto. Venid a la boda”.

Pero ellos no hicieron caso; uno se marchó a sus tierras, otro a sus negocios, los demás agarraron a los criados y los maltrataron y los mataron.

El rey montó en cólera, envió sus tropas, que acabaron con aquellos asesinos y prendieron fuego a la ciudad.

Luego dijo a sus criados:
“La boda está preparada, pero los convidados no se la merecían. Id ahora a los cruces de los caminos y a todos los que encontréis, llamadlos a la boda”.

Los criados salieron a los caminos y reunieron a todos los que encontraron, malos y buenos. La sala del banquete se llenó de comensales. Cuando el rey entró a saludar a los comensales, reparó en uno que no llevaba traje de fiesta y le dijo:
“Amigo, ¿cómo has entrado aquí sin el vestido de boda?”.

El otro no abrió la boca. Entonces el rey dijo a los servidores:
“Atadlo de pies y manos y arrojadlo fuera, a las tinieblas. Allí será el llanto y el rechinar de dientes”.

Porque muchos son los llamados, pero pocos los elegidos».


3. Hacia una Iglesia sinodal misionera


3.5 Vida Sinodal y liturgia

Tensiones a gobernar: renovación y reconciliación

91. Muchas síntesis alientan fuertemente la implementación de un estilo sinodal de celebración litúrgica que permita la participación activa de todos los fieles para acoger todas las diferencias, valorar todos los ministerios y reconocer todos los carismas. En este sentido, la escucha sinodal de las Iglesias registra muchas cuestiones que deben abordarse: desde el replanteamiento de una liturgia demasiado centrada en quien preside, hasta las formas de participación activa de los laicos, pasando por el acceso de las mujeres a las funciones ministeriales. «Sin dejar de ser fieles a la tradición, a su originalidad, antigüedad y uniformidad, intentamos que la celebración litúrgica sea más viva y participada por toda la comunidad de creyentes: sacerdotes, laicos, jóvenes y niños, que leen los signos de los tiempos con discernimiento sólido. Los jóvenes intentan encontrar un lugar en la liturgia con los himnos y es positivo» (CE Etiopía). 

92. En este sentido, la experiencia de las Iglesias también registra nudos de conflicto, que deben ser abordados de forma sinodal, como es el discernimiento de la relación con los ritos preconciliares: «las divisiones sobre la celebración de la liturgia se han reflejado en las consultas sinodales. “Desgraciadamente, la celebración de la Eucaristía se vive también como un motivo de división dentro de la Iglesia. En el ámbito litúrgico, la cuestión más común es la celebración de la misa preconciliar”. La gente se queja de las restricciones en el uso del misal de 1962; muchos consideran que las diferencias sobre la forma de celebrar la liturgia “llegan a veces al nivel de la animosidad. Las personas de ambos bandos dicen sentirse juzgadas por quienes tienen una opinión diferente”» (CE Estados Unidos). La Eucaristía, sacramento de la unidad en el amor en Cristo, no puede convertirse en motivo de enfrentamiento ideológico, ruptura o división. Además, existen elementos de tensión propios del ámbito ecuménico, con un impacto directo en la vida de muchas Iglesias, como, por ejemplo, compartir la Eucaristía. Por último, hay problemas relacionados con las modalidades de inculturación de la fe y el diálogo interreligioso, que también afectan a las formas de la celebración y la oración. 43 44

 93. Las síntesis no dejan de resaltar también las principales limitaciones de la praxis celebrativa, que oscurecen su eficacia sinodal. En particular, se subraya: el protagonismo litúrgico del sacerdote y la pasividad de los participantes; el alejamiento de la predicación respecto a la belleza de la fe y la concreción de la vida; la separación entre la vida litúrgica de la asamblea y la red familiar de la comunidad. La calidad de las homilías se señala casi unánimemente como un problema: se piden «homilías más profundas, centradas en el Evangelio y en las lecturas del día, y no en la política, y que utilicen un lenguaje accesible y atractivo» (Iglesia maronita). 

94. Una fuente particular de sufrimiento son todas aquellas situaciones en las que el acceso a la Eucaristía y a los demás sacramentos se ve obstaculizado o impedido por diversas causas. Son intensas las peticiones para que se busque una solución a estas formas de privación de los sacramentos. Se citan, por ejemplo, las comunidades que viven en zonas muy remotas, o el uso del cobro de tarifas por el acceso a las celebraciones, que discrimina a los más pobres. Muchas síntesis también dan voz al dolor que experimentan los divorciados vueltos a casar por no poder acceder a los sacramentos, así como los que han contraído un matrimonio polígamo. No hay unanimidad sobre cómo tratar estas situaciones: «se niega la posibilidad de recibir la Sagrada Comunión a los divorciados vueltos a casar, que expresan su dolor por esta exclusión. Algunos creen que la Iglesia debería ser más flexible, mientras que otros piensan que esta práctica debe mantenerse» (CE Malasia)


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miércoles, 4 de octubre de 2023

HOJA PARROQUIAL. DOMINGO XXVII DEL TIEMPO ORDINARIO. CICLO A


           



Eres la piedra angular que nos sostiene




HOJA PARROQUIAL

7 y 8 de Octubre del 2023
Domingo XXVII del Tiempo Ordinario. Ciclo A


Parroquias de Tazacorte y Ntra. Sra. de Fátima en Tijarafe

Texto tomados de la página web de acción católica en España. Dibujo obra de Fano


"Arrendará la viña a otros labradores" 


En el Evangelio de hoy hay una primera parte en la que Jesús cuenta una parábola (33) y en un segundo momento Jesús mismo nos ofrece la interpretación de la parábola (42). 

• Esta parábola es un resumen de la historia del pueblo de Dios. Una historia de rechazo al Plan de Dios y de paciencia de Dios, de amor de Dios hasta el extremo.

 • La parábola nos muestra cómo Dios ha ido actuando y la respuesta que ha tenido y que continúa teniendo. 

• Los protagonistas de la parábola son el propietario de la viña y los labradores a quienes arrienda la viña. 

• El dueño de la viña tiene sumo cuidado con ella “la plantó”, “la rodeó con una cerca”, “cavó un lagar”, “construyó una torre”… El propietario es Dios.

 • Al marcharse de viaje deja su propiedad en manos de unos labradores, la arrienda. Llegado el tiempo de la recolección, como es normal pues era su viña, mandó a sus criados para recoger lo que le correspondía por la viña arrendada. Pero los labradores terminan con la vida de los criados, para apoderarse de la viña y de sus beneficios (35). 

• Para colmo el dueño manda a su propio hijo, que corre la misma suerte que los criados (39).

 • Los labradores actúan con violencia y el dueño de la viña es admirable por su paciencia. Así ha actuado Dios y así actuamos con frecuencia nosotros. 

• La viña es el Pueblo de Dios. El dueño es Dios. Los labradores son los sacerdotes y los fariseos. Los criados son los profetas y el hijo es Jesús. A la larga historia de desprecio que sufrieron los profetas hay que añadir para culmen el rechazo al Hijo de Dios, a Jesús. 

• El amor, el amor de Dios no ha sido correspondido como se merecía. Esa es la historia de Dios con la humanidad y de la humanidad con Dios. Pero es conveniente que no nos quedemos en el pasado, la parábola se actualiza.

 • La Iglesia es ahora la viña del Señor. Dios es el dueño de la Iglesia y no nosotros. ¿Quiénes son los criados ahora y cómo son tratados? ¿Quiénes son los labradores y cómo actúan? 

• Nosotros somos el campo de Dios, ¿la Iglesia del siglo XXI da los frutos que Dios espera? 

• Para concluir Jesús nos habla de la piedra que desecharon y se ha convertido en piedra angular (42). Él es esa piedra angular del edificio, del Pueblo de Dios, compuesto de judíos y de paganos, que ha venido a instaurar. Nosotros somos miembros, piedras vivas, de ese edificio que tiene como piedra fundamental a Jesucristo.







                 LECTURAS

Primera lectura. Lectura del libro de Isaías

Voy a cantar a mi amigo
el canto de mi amado por su viña.
Mi amigo tenía una viña en un fértil collado.
La entrecavó, quitó las piedras y plantó buenas cepas;
construyó en medio una torre y cavó un lagar.
Esperaba que diese uvas, pero dio agrazones.
Ahora, habitantes de Jerusalén, hombres de Judá,
por favor, sed jueces entre mí y mi viña.
¿Qué más podía hacer yo por mi viña que no hubiera hecho?
¿Por qué, cuando yo esperaba que diera uvas, dio agrazones?
Pues os hago saber lo que haré con mi viña:
quitar su valla y que sirva de leña,
derruir su tapia y que sea pisoteada.
La convertiré en un erial: no la podarán ni la escardarán,
allí crecerán zarzas y cardos,
prohibiré a las nubes que lluevan sobre ella.
La viña del Señor del universo es la casa de Israel
y los hombres de Judá su plantel preferido.
Esperaba de ellos derecho, y ahí tenéis: sangre derramada; esperaba justicia, y ahí tenéis: lamentos. 


Salmo 79, 9 y 12. 13-14. 15-16. 19-20 R/. La viña del Señor es la casa de Israel

Sacaste una vid de Egipto,

expulsaste a los gentiles, y la trasplantaste.
Extendió sus sarmientos hasta el mar,
y sus brotes hasta el Gran Río. R/.

¿Por qué has derribado su cerca
para que la saqueen los viandantes,
la pisoteen los jabalíes
y se la coman las alimañas? R/.

Dios del universo, vuélvete:
mira desde el cielo, fíjate,
ven a visitar tu viña.
Cuida la cepa que tu diestra plantó.
y al hijo del hombre que tú has fortalecido. R/.

No nos alejaremos de ti:
danos vida, para que invoquemos tu nombre.
Señor, Dios del universo, restáuranos,
que brille tu rostro y nos salve. R/.

ANTÍFONA CANTADA DEL SALMO PINCHANDO AQUÍ

Segunda lectura. Lectura de la carta del apóstol San Pablo a los Filipenses.

Hermanos:
Nada os preocupe; sino que, en toda ocasión, en la oración y en la súplica, con acción de gracias, vuestras peticiones sean presentadas a Dios.

Y la paz de Dios, que supera todo juicio, custodiará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.

Finalmente, hermanos, todo lo que es verdadero, noble, justo, puro, amable, laudable, todo lo que es virtud o mérito, tenedlo en cuenta.

Lo que aprendisteis, recibisteis, oísteis, visteis en mí, ponedlo por obra.

Y el Dios de la paz estará con vosotros. 

Evangelio Según San Mateo 21, 33-43

En aquel tiempo, dijo Jesús a los sumos sacerdotes y a los ancianos del pueblo:

«Escuchad otra parábola: “Había un propietario que plantó una viña, la rodeó con una cerca, cavó en ella un lagar, construyó una torre, la arrendó a unos labradores y se marchó lejos. Llegado el tiempo de los frutos, envió sus criados a los labradores para percibir los frutos que le correspondían. Pero los labradores, agarrando a los criados, apalearon a uno, mataron a otro y a otro lo apedrearon.

Envió de nuevo otros criados, más que la primera vez, e hicieron con ellos lo mismo. Por último, les mandó a su hijo diciéndose: ‘Tendrán respeto a mi hijo’.

Pero los labradores, al ver al hijo se dijeron: ‘Este es el heredero: venid, lo matamos y nos quedamos con su herencia’.

Y agarrándolo, lo sacaron fuera de la viña y lo mataron. Cuando vuelva el dueño de la viña, ¿qué hará con aquellos labradores?».

Le contestan:
«Hará morir de mala muerte a esos malvados y arrendará la viña a otros labradores que le entreguen los frutos a su tiempo».

Y Jesús les dice:
«No habéis leído nunca en la Escritura:

“La piedra que desecharon los arquitectos
es ahora la piedra angular.
Es el Señor quien lo ha hecho,
ha sido un milagro patente”

Por eso os digo que se os quitará a vosotros el reino de Dios y se dará a un pueblo que produzca sus frutos».



3. Hacia una Iglesia Sinodal Misionera


3.5 Vida sinodal y liturgia

88. Las síntesis destacan de muchas maneras el profundo vínculo entre la sinodalidad y la liturgia: «en el caminar juntos, la oración, la devoción a María como discípula misionera y oyente de la Palabra de Dios, los ejercicios de lectio divina y la celebración litúrgica inspiran el sentido de pertenencia» (CE Colombia).

Un arraigo profundo 

89. La Eucaristía es ya, en sí misma, “fuente y cumbre” del dinamismo sinodal de la Iglesia. «La celebración litúrgica y la oración se viven como una fuerza de unión y movilización de las energías humanas y espirituales. La opinión predominante es que la oración favorece la alegría de vivir y el sentido de comunidad, porque se ve como un punto de referencia, un lugar de fortaleza y un oasis de paz. [...] Las aportaciones hacen hincapié en dos formas de desarrollar un camino sinodal: la unidad comunitaria y la alegría de vivir. Este camino pasaría por grandes encuentros litúrgicos (peregrinaciones...), para alimentar la piedad popular, renovar la fe, alimentar el sentimiento de pertenencia, y así acompañar mejor a los cristianos para que den testimonio del Evangelio de la caridad frente al comunitarismo y el repliegue identitario, cada vez más visibles y agresivos» (CE Burkina Faso y Níger). 

90. En países de diferentes zonas del mundo «la vinculación a la Iglesia de muchos bautizados pasa especialmente por el fenómeno de la religiosidad popular. [...] Muchas personas conciben este hecho como muestra de su pertenencia a la Iglesia; por lo cual, debemos fomentar y evangelizar, para que exista una mayor participación e incorporación consciente a la vida cristiana» (CE Panamá).


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