viernes, 26 de junio de 2020

ORACIÓN DE LA MISIÓN DIOCESANA

Señor Jesucristo,
conserva en tu amor a todos los que peregrinamos en la Iglesia Nivariense.

Espíritu Santo, enciende en nosotros el fuego de tu amor y el deseo de amarte.

Fortalece nuestra fe de discípulos y envíanos en tu Nombre como alegres misioneros.

Danos el coraje de anunciarte a los hombres y mujeres de nuestro tiempo, comprometiéndonos en la Misión diocesana, y siendo testigos del Evangelio en el corazón de estas islas.

Te lo pedimos por intercesión de la Santísima Virgen María, Estrella de la nueva evangelización. Amén.

ORACIÓN BICENTENARIO DE LA DIÓCESIS

Oh Dios, Tú haces que,
en cada una de las Iglesias Diocesanas
que peregrinan por el mundo,
se manifieste la realidad de la Iglesia,
una, santa, católica y apostólica.

Haz que en nuestra Diócesis,
bajo la guía del Obispo,
los fieles nos unamos de tal forma que,
congregados en el Espíritu Santo,
por el Evangelio y la eucaristía,
hagamos presente
la universalidad de tu pueblo
y seamos signo e instrumento
de la presencia de Cristo en el mundo.

Te pedimos que se manifiesten
con toda su fuerza 
y perseverar hasta el fin,
en nuestra Diócesis Nivariense,
la integridad de la fe,
la santidad de las costumbres,
el amor fraterno y la devoción sincera.

Y ya que no dejas de alimentarnos
con tu Palabra y con el Cuerpo de tu Hijo,
no ceses tampoco de conducirnos,
hacia la plenitud de tu Reino,
bajo la protección de la Virgen María.
Nuestra Señora de los Remedios.

Por Jesucristo Nuestro Señor. Amén

miércoles, 24 de junio de 2020

HOJA PARROQUIAL XIII TIEMPO ORDINARIO

HOJA PARROQUIAL
27 y 28 de Junio de 2020
Domingo XIII del Tiempo Ordinario. Ciclo A.
Parroquias de Tazacorte y Ntra. Sra. de Fátima en Tijarafe

Textos tomados de la página web de los dominicos en España. Dibujos obra de Fano.

"El que pierda su vida por mi”





Las palabras de Jesús según el evangelio de Mateo de hoy son muy desconcertantes, exigentes y comprometedoras y no admiten componendas para quien desee ser discípulo de Jesús. “El que quiere a su padre o a su madre más que a mí, no es digno de mí”. Aunque estemos tentados, no son para hacer de ellas un acomodo “espiritual” y quitarles toda la fuerza que encierran, porque encierran el rasgo fundamental de la Iglesia de Jesús, que, según este texto de Mateo, es la fidelidad al Maestro, que consiste ineludiblemente en poner en práctica su forma de vida y el contenido de su predicación, fundamentalmente las bienaventuranzas. En caso de que tengamos como prioritarias otras fidelidades, simplemente no somos la Iglesia de Jesús. De todo ello se sigue que la Iglesia de Jesús no “es”, sino que se “va haciendo” Iglesia cuando los que la formamos acreditamos nuestra misión en la obediencia al Señor y en la vida consecuente con esto. La Iglesia no es una realidad ideal e inmutable, hecha por Dios con toda la perfección sin nuestro concurso, como proclamamos en el credo (una, santa, católica y apostólica), sino que siempre es Iglesia en marcha y nunca acabada, de discípulos fieles y, al mismo tiempo, pecadores. Además, la noción de discípulo no permite hacer distinciones radicales dentro de la Iglesia, sino que equipara a todos los discípulos y discípulas en la misión y en la autoridad que les confiere y encarga Jesús.

Las palabras que Mateo pone en boca de Jesús nos obligan a dar otro rostro a la Iglesia de hoy. Una determinada forma de actuar decide claramente si pertenecemos o no a la Iglesia de Jesús. Hoy Mateo nos diría que la fidelidad al Maestro y al Reino de Dios no es compatible con la fidelidad a nuestro modo de vida actual, en el que la ganancia económica de unos pocos está por encima de todo y a costa de la vida de muchísimas personas en nuestro planeta. Quien prefiera guardar fidelidad a este mundo de la producción y del consumo, que convierte todo en mercancía, que expolia sin medida a la naturaleza y que deja a millones de personas en el más absoluto desamparo, tendrá que preguntarse seriamente, ante las palabras de Jesús, si esta fidelidad es compatible con guardarle fidelidad a Él y al Reino de Dios.







LECTURAS

Primera lectura del segundo libro de los Reyes 4, 8-11. 14-16a

Pasó Eliseo un día por Sunén. Vivía allí una mujer principal que le insistió en que se quedase a comer; y, desde entonces, se detenía allí a comer cada vez que pasaba. Ella dijo a su marido: «Estoy segura de que es un hombre santo de Dios el que viene siempre a vernos. Construyamos en la terraza una pequeña habitación y pongámosle arriba una cama, una mesa, una silla y una lámpara, para que cuando venga pueda retirarse». Llegó el día en que Eliseo se acercó por allí y se retiró a la habitación de arriba, donde se acostó. Entonces se preguntó Eliseo: «¿Qué podemos hacer por ella?». Respondió Guejazí, su criado: «Por desgracia no tiene hijos y su marido es ya anciano». Eliseo ordenó que la llamase. La llamó y ella se detuvo a la entrada. Eliseo le dijo: «El año próximo, por esta época, tú estarás abrazando un hijo».

Salmo 88, 2-3. 16-17. 18-19 R/. Cantaré eternamente las misericordias del Señor.

Cantaré eternamente las misericordias del Señor, anunciaré tu fidelidad por todas las edades. Porque dijiste: «La misericordia es un edificio eterno», más que el cielo has afianzado tu fidelidad. R/.

Dichoso el pueblo que sabe aclamarte: caminará, oh, Señor, a la luz de tu rostro; tu nombre es su gozo cada día, tu justicia es su orgullo. R/.

Porque tú eres su honor y su fuerza, y con tu favor realzas nuestro poder. Porque el Señor es nuestro escudo, y el Santo de Israel nuestro rey. R/.

Segunda lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Romanos 6, 3-4. 8-11

Hermanos: Cuantos fuimos bautizados en Cristo Jesús fuimos bautizados en su muerte. Por el bautismo fuimos sepultados con él en la muerte, para que, lo mismo que Cristo resucitó de entre los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en una vida nueva. Si hemos muerto con Cristo, creemos que también viviremos con él; pues sabemos que Cristo, una vez resucitado de entre los muertos, ya no muere más; la muerte ya no tiene dominio sobre él. Porque quien ha muerto, ha muerto al pecado de una vez para siempre; y quien vive, vive para Dios. Lo mismo vosotros, consideraos muertos al pecado y vivos para Dios en Cristo Jesús.

Evangelio según san Mateo 10, 37-42

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus apóstoles: «El que quiere a su padre o a su madre más que a mí, no es digno de mí; el que quiere a su hijo o a su hija más que a mí, no es digno de mí; y el que no carga con su cruz y me sigue, no es digno de mí. El que encuentre su vida la perderá, y el que pierda su vida por mí, la encontrará. El que os recibe a vosotros, me recibe a mí, y el que me recibe, recibe al que me ha enviado; el que recibe a un profeta porque es profeta, tendrá recompensa de profeta; y el que recibe a un justo porque es justo, tendrá recompensa de justo. El que dé a beber, aunque no sea más que un vaso de agua fresca, a uno de estos pequeños, solo porque es mi discípulo, en verdad os digo que no perderá su recompensa».




YOUCAT

196 ¿Quién puede ser bautizado y qué se le exige a un candidato al Bautismo?

Cualquier persona que no esté aún bautizada puede recibir el Bautismo. La única condición para el Bautismo es la fe, que debe ser confesada públicamente en la celebración del sacramento. Quien se vuelve al cristianismo cambia no sólo su concepción del mundo. Entra en un camino de aprendizaje (CATECUMENADO) en el que llega a ser, mediante la conversión personal, pero sobre todo por el don del Bautismo, un hombre nuevo. Ahora es un miembro vivo del Cuerpo de Cristo.

197 ¿Por qué mantiene la Iglesia la práctica del Bautismo de niños?

La Iglesia mantiene desde tiempos inmemoriales el Bautismo de los niños. Para ello hay una única razón: antes de que nosotros optemos por Dios, Dios ya ha optado por nosotros. El Bautismo es, por tanto, una gracia, un regalo inmerecido de Dios, que nos acepta incondicionalmente. 

Los padres creyentes que quieren lo mejor para su hijo, quieren también el Bautismo, en el cual el niño es arrancado del influjo del pecado original y del poder de la muerte. El Bautismo de niños supone que los padres cristianos educan al niño bautizado en la fe. Es una injusticia privar al niño del Bautismo por una liberalidad mal entendida. Lo mismo que no se puede privar al niño del amor, para que después pueda él mismo decidirse por el amor, sería una injusticia si los padres creyentes privaran a su hijo de la gracia de Dios recibida en el Bautismo.

Así como todo ser humano nace con la capacidad de hablar, pero debe aprender a hablar, igualmente todo hombre nace con la capacidad de creer, pero debe aprender a conocer la fe. No obstante, no se puede imponer el Bautismo a nadie. Si se recibe el Bautismo de niño, hay que «ratificarlo» después personalmente a lo largo de la vida; es decir, hay que decir «sí» al Bautismo para que éste dé fruto.”

198 ¿Quién puede administrar el Bautismo?

Normalmente es el OBISPO, un PRESBÍTERO o un DIÁCONO quien administra el SACRAMENTO del Bautismo. En caso de necesidad, cualquier cristiano, e incluso cualquier persona, puede bautizar, siempre que derrame agua sobre la cabeza del candidato diciendo: «Yo te bautizo en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo». 

El Bautismo es tan importante que incluso un no cristiano puede bautizar. Sólo tiene que tener la intención de hacer lo que hace la Iglesia cuando bautiza.

lunes, 22 de junio de 2020

CRISTO CRUCIFICADO (em português)

CRISTO CRUCIFICADO


  Escultura flamenga realizada entre 1513 e 1522 em madeira de carvalho policromada, de 57 cm de altura e 51 cm de largura. Trata-se de uma escultura maciça com os braços adicionados em espiga. Destaca a coroa de espinhos pelo seu grande volume. Atualmente fica na área do Batistério.


  Esta escultura segue o tipo iconográfico gótico do Cristo morto na cruz, reproduzindo com pequenas variações o modelo da imagem de maiores dimensões do Cristo de los Mulatos da paróquia matriz de El Salvador e a sua réplica de menor tamanho do Museu da Arte Sacra do Funchal, na Madeira, que pertenceu ao templo do convento de São Francisco.


  Tendência à verticalidade da sua rígida figura, só interrompida pela inclinação da cabeça caída frontalmente sobre o ombro direito e pelo ligeiro arqueamento da perna esquerda para cruzar o pé por baixo da flexionada perna direita, possibilitando assim o difícil traspasso de ambos os pés sobrepostos por um só prego, e mesmo na leve inclinação dos braços em relação à direção horizontal do patíbulo ou viga transversal, da qual eles pendem estendidos quase perpendicularmente, o que lhe confere uma aparência peculiar de ausência de gravidade, apesar da forte compleição de seu pequeno corpo.


  O rosto mostra um aspeto doloroso já atenuado pela serena placidez da morte, com os arcos superciliares endireitados em direção ao início do nariz largo de ponta romba; as bochechas salientes, contornando as profundas órbitas onde ficam esses olhos esbugalhados agora ocultos pelas pálpebras; uma boca inexpressiva com lábios finos, incipiente bigode e barba lisa com a típica bifurcação encaracolada nos extremos. Cabelos escuros penteados com uma risca no meio e cingidos pela volumosa coroa de espinhos que cobre até a metade da testa, enquadrando o rosto oval com amplas ondas puxadas para trás na altura das têmporas, enquanto se espalha em madeixas sinuosas sobre o peito, no lado oposto.


  Esta peça poderia ser identificada com aquele "Cristo pequeno muito devoto", pregado numa "cruz de madeira com folhagem de chumbo lavrado, a qual é dourada", que formava um Calvário junto com as esculturas da "Nossa Senhora (das Dores) e de São João Evangelista”, ladeando-o dentro de “uma caixa de madeira”, no altar principal da antiga ermida de San Miguel Arcángel de Tazacorte, onde ocupava o espaço entre o “Crucifixo de vulto” de tamanho médio colocado no centro do nivel superior e o grupo escultórico sentado de "Nossa Senhora Santa Ana com Nossa Senhora com o seu Filho nos braços, à sua direita".


  No entanto, a existência deste Crucificado já tinha sido brevemente registada por ocasião da visita, no sábado 13 de dezembro de 1522, de Frei Vicente Peraza, bispo de Tierra Firme del Darién, já que na breve relação dos itens se incluía esse “pequeno crucifixo dourado com São João e Nossa Senhora, colocado num tabernáculo coberto por um véu de seda”.




IMAGEN DE NUESTRA SEÑORA DEL ROSARIO (em português)


A IMAGEM DA NOSSA SENHORA DO ROSÁRIO


Trata-se de uma delicada escultura que se encontra num pequeno retábulo da nave lateral. Esteve retirada do culto por vários anos.


  É uma imagem de vestir de 85 cm de altura. É atribuída a Aurelio Carmona pelo licenciado em Belas Artes da Universidade de Sevilha, Domingo Cabrera Benítez.


  Este observava "certas feições de candidez infantil, não só nos rostos do Menino e a sua Mãe, mas também na maneira de esculpir do autor". Ele acrescentava que "o sorriso da Virgem só pode ser fruto da inocência de quem dá os seus primeiros passos na arte, sendo totalmente diferente das suas obras de maturidade, mesmo daquelas com a mesma dedicação como é o caso da Nossa Senhora do Rosário da paróquia de San Pedro, na Breña Alta”.







CÁLIZ Y ARQUETA (em português)

O CÁLICE E A ARQUETA


  “A arqueta de Tazacorte é uma arqueta prismática de madeira forrada em couro gofrado em oro com tampa semicircular. Asa rebatível sobre a cobertura e fechadura na frente, ambas em bronze. A decoração baseada em motivos vegetais em formações geométricas e fitas curvilíneas de desenho simétrico formando faixas e medalhões, distribui-se numa faixa principal cercada por frisos de folhas de videira e volutas, como cornija e rodapé. Todos renacentistas com cabeças de perfil simetricamente enfrentadas femininas e masculinas (lembram a efígie de Carlos V) repetem-se sobre a tampa e os laterais. Tanto o formato e as proporções da caixa como a sua decoração seguem as novas tendências do renascimento italiano.”

 

  Esta arqueta tem as medidas de: 28 x 19 cm (base), 18,30 cm (altura) e é anterior a 1570. Contém as relíquias que o Papa São Pio V entregou em Roma ao padre Inácio de Azevedo. Entre as vinte e duas inventariadas em 1718, a magnífica arqueta contém as seguintes relíquias: parte da tíbia de Santa Cristina (uma jovem da Toscana que sofreu os mais terríveis martírios), o maxilar de Santa Inés (virgem e mártir romana decapitada após ter saído ilesa da fogueira), ossos do Papa São Gregório Magno (um dos quatro Padres da Igreja Latina e eleito Pontífice contra a sua vontade em 590), roupas das Onze Mil Virgens (asseteadas junto com Santa Úrsula pelos hunos diante das muralhas de Colónia), uma costela dos Santos Inocentes (as cento e quarenta mil vítimas do cruel Herodes), um pedaço da cabeça de São Vicente Mártir (diácono aragonês martirizado em Valência no ano 304 durante a perseguição de Diocleciano), etc.


  O cálice de prata era o que existia na ermida de São Miguel de Tazacorte, propriedade daquele templo, e não podia aparecer como uma das relíquias oferecidas. Este famoso cálice foi conservado em Tazacorte por cento e setenta e cinco anos, a partir da data em que o Padre Inácio celebrou com ele, ou seja, de 1570 até ao final de maio de 1745, quando o senhor Bispo D. Juan Francisco Guillén, numa visita ao santuário de Tazacorte, levou-o consigo, entregando-o aos Padres Jesuítas de Gran Canaria, de onde parece que mais tarde foi transferido à igreja do mosteiro de religiosas Bernardas da referida ilha; cálice que nesta última residência só era usado na Quinta-Feira Santa.


  O próprio bispo determina que é uma tradição constante entre o povo que a Eucaristia de 13 de julho ocorreu nesta igreja e que o martírio aconteceu à vista do porto. (Veja a lápide na parte de trás da igreja na nave central).


  Este cálice esteve em Roma desde 1831 até à sua chegada a La Palma, a 16 de julho de 2009.





EL RELICARIO Y LA CASULLA DE LOS MÁRTIRES (em português)

O RELICÁRIO E A CASULA DOS MÁRTIRES

  

  Sabe-se pelo inventário de 1613 que, entre a mesa do altar-mor e o pedestal sobre o qual se venera a imagem flamenga do Arcanjo São Miguel, havia uma "caixinha ou relicário onde ficam as relíquias que são guardadas na igreja...".

  

  Outras visitas eclesiásticas em 1672 e 1701 confirmaram que as relíquias da igreja de San Miguel e as que são atualmente custodiadas no santuário vizinho de Las Angustias se veneravam conjuntamente no primeiro oratório dentro de "um caixote coberto com tafetá, onde havia um cofrezinho forrado interiormente de veludo vermelho e nele as Santas Relíquias embrulhadas nuns painéis e tafetás com os seus rótulos renovados...”.


  Naquela altura, as chaves do cofrezinho e do caixote das relíquias estavam na cidade, na posse de Juan de Monteverde, descendente do primeiro proprietário das fazendas da zona. Depois, passaram para o oficial militar, Juan de Sotomayor Topete. Posteriormente, três das relíquias foram para a ermida de Las Angustias, "um pedaço de pão que sobrou do milagre de Cristo com as multidões, parte do capacete de Santo Estêvão e parte de um maxilar de Santa Apolónia" para serem custodiadas num cofrezinho pequeno, dourado e esmaltado que ainda existe dentro de um nicho envidraçado feito numa parede lateral da capela principal.


  Os escritos da visita de 1745 relatam como as relíquias foram transferidas para Santa Cruz de La Palma. Lá foram depositadas no oratório episcopal, enquanto eram construídas umas urnas "muito decentes", feitas com três chaves (uma para o vigário, outra para o padre de Los Llanos e a última "sob os cuidados do cavalheiro que costuma tê-la"). É provável que, para a primeira igreja, seja o tabernáculo que ainda é conservado no retábulo colateral da Epístola. É um sacrário de madeira pintado externamente com cenas alusivas ao martírio dos jesuítas. O bispo nivariense Rey Redondo visitou a ermida e as relíquias. Ele ordenou que o tabernáculo fosse fornecido com apenas uma chave e que esta fosse mantida num lugar seguro. Ele indicou que o referido sacrário não fosse restaurado ou reformado externamente, pois é “decorado com pinturas antigas que representam o martírio dos santos Inácio de Azevedo e os seus companheiros, cuja prevenção também se estende ao quadro que é preservado na referida igreja com o retrato dos Santos Mártires”.


  Segundo a tradição, o beato Inácio de Azevedo teria celebrado a última missa com esta casula a 15 de julho de 1570 na ermida de San Miguel Arcángel. É confecionada com damasco de seda verde e as suas medidas são 105 x 65,5 cm. É conservada no referido templo. No entanto, a primeira notícia sobre esta peça é um pouco mais tardia e data de 1895, quando o bispo Nicolás Rey Redondo, durante uma visita a Los Llanos de Aridane, deu pela existência na ermida de Tazacorte de "uma casula verde com a qual, segundo a tradição, celebrou por última vez o Santo Sacrifício da Missa o santo mártir Inácio de Azevedo”. Foi precisamente então que o prelado proibiu que qualquer padre celebrasse missa com ela. Da mesma forma, ciente do valor da peça, ordenou a construção de "uma caixa onde seja conservado esse ornamento sagrado com uma inscrição da piedosa tradição". O professor Pérez Morera informa que o próprio bispo tinha mandado recolher informações das pessoas idosas e dos padres mais antigos do país, "principalmente o presbítero José Rodríguez Pérez, que foi um dos que nos comunicou a importante notícia".


  Precisamente o mesmo investigador, no seu meticuloso estudo sobre este ornamento religioso, diz que não parece ir além do século XVII, de acordo com a documentação à qual ele teve acesso. Assim, no inventário de 1613, não figura nehuma casula de damasco verde e só há constância da existência de duas casulas velhas e muito usadas, uma de pano vermelho e roxo e outra de damasco amarelo.


  É lamentável que nenhuma das valiosas vestimentas com as quais o cavalheiro Jácome de Monteverde tinha dotado a ermida tenha chegado até nós. Em 1528, eram consideradas "as mais ricas que existem nestas ilhas". Pérez Morera detalha no seu estudo que "eram três casulas, a primeira de seda fina, a segunda de pano vermelho e roxo com as figuras do Crucificado, a Virgem e São Pedro, e a terceira de sarja roxa". Em 1577, informou-se de novas peças: “uma vestimenta de brocado falso amarelo…; uma casula de veludo preto bordada em ouro...; uma vestimenta de pano de Londres e uma vestimenta de chamelote amarelo...".


  Os vários fragmentos de damasco que se podem distinguir na confeção da peça em questão não parecem ser remendos. Talvez tenha sido feita dessa maneira originalmente para aproveitar ao máximo o tecido. Os desenhos são iguais aos do magnífico Terno de la Conquista da paróquia de El Salvador, na capital de La Palma, anteriores a 1687. Um damasco no qual pode ser visto um desenho de geometria vegetal pronunciada, com “buquês de flores, romãs e caules dispostos em faixas alternativas à direita e à esquerda”.


  O mesmo investigador também informa de uma curiosidade. O bispo García Ximénez tinha recomendado em 1673 que os ornamentos da culto divino "fossem feitos com damasco de Espanha e não da Itália, por causa da maior durabilidade". A sua conclusão é que é um damasco tecido em Toledo, Granada, Valência ou Sevilha. É preciso lembrar que Toledo foi, juntamente com Granada, o mais importante centro da indústria da seda em Espanha durante os séculos XVI e XVII.




IGLESIA DE SAN MIGUEL (em português)

IGREJA DE SÃO MIGUEL


  A 29 de setembro de 1492, o tenente de milícias D. Alonso Fernández de Lugo desembarcou na costa de Tazacorte, escolhendo o dia de São Miguel por ser este o santo preferido de Isabel I a Católica. Reuniu-se o tenente com os reis aborígenes da ilha no Vale de Aridane e disse: "Eu, Alonso Fernández de Lugo, em nome do Papa Alexandre VI e as suas majestades os reis de Castela D. Fernando II e D.ª Isabel I, conquisto esta ilha chamando-a San Miguel de la Palma". Sob a dedicação a São Miguel, foi erigida a primeira ermida da ilha em homenagem ao Santo Arcanjo. 


  A Vila e o Porto de Tazacorte foram os primeiros lugares onde o Santo Arcanjo foi venerado na ilha. Esta vila mantém-no como padroeiro e titular da paróquia, junto com a N. Sra. do Carmo. Tanto a ermida de São Pedro Apóstolo (Argual), como a da N. Sra. das Angústias e a de São Miguel em Tazacorte, foram construídas pelos senhores das fazendas e fábricas de açúcar, que as tinham por próprias, como privilégio intrínseco à sua posição social. Todas elas tinham na origem características semelhantes, de maneira que a mais velha das três, a de São Miguel, serviu possivelmente de modelo para as posteriores.


  Este tipo de ermida, com características específicas dentro da arquitetura religiosa palmera, remonta aos primeiros anos da colonização castelhana e combinava por um lado a tradição mudéjar hispano-muçulmana com formas importadas talvez da Holanda.


  Ao contrário das ermidas tradicionais da ilha, com uma porta principal, varanda e campanário superior no mesmo eixo vertical, tinham uma fachada principal terminada numa empena triangular, formada pelas duas vertentes do telhado, e um pequeno campanário para o único sino num dos laterais. Na atualidade, apenas a ermida de São Pedro conserva essa disposição original. Em 1513, quando Jácome de Monteverde chegou a La Palma para administrar as suas fazendas açucareiras, encontrou no meio dos seus canaviais uma igreja que se dizia de Sant Miguel, que já naquela época estava em decadência e derrubada, porque não era em vão que tinha sido a primera a ser construída nesta ilha.


  Para que a dedicação a São Miguel não se perdesse, Jácome de Monteverde empreendeu a construção de outra igreja, que financiou com os seus próprios escravos e bois. A obra realizada, aparentemente sob a licença do bispo D. Frenando Vázquez de Arce, foi concluída a 13 de dezembro de 1522.

A igreja foi ampliada em meados do século passado, já que era insuficiente para os seus paroquianos ao elevar-se para a categoria de paróquia, quando foi desmembrada a da N. Sra. dos Remédios de Los Llanos de Aridane em 1920, adicionando uma nave lateral.










IMAGEN DE SAN MIGUEL (em português)

IMAGEM DE SÃO MIGUEL


  A imagem de São Miguel Arcanjo é uma esplêndida escultura policromada e dourada no estilo gótico tardio flamengo, executada na Flandres durante o primeiro terço do século XVI.

Segundo a sua iconografia usual, o Arcanjo é representado no momento de abater o dragão apocalíptico (Ap. 12, 7-9), ou seja, Satanás, que se contorce aos seus pés sob a aparência de um monstro híbrido ao juntar-se na sua figura elementos proprios de diferentes espécies animais: chifres de cabra na testa, presas de javali na boca, garras de leão e asas de morcego membranosas nos membros anteriores, cascos de cabra nos quartos traseiros e uma cauda de símio, escolhida pelo seu tradicional simbolismo demoníaco.


  De acordo com o caráter bélico do tema encarnado e devido à influência do teatro religioso medieval, o capitão alado das milícias celestes é anacronicamente protegido por um capacete empenachado, uma couraça com as saias dispostas sobre uma cota de malha mal interpretada e presas ao peitoral por meio de tiras com fivelas, joelheiras decoradas com motivos espirais em relevo e ailerons ou barbatanas, combinando com a única cotoveleira visível, duas pequenas lâminas imbricadas, as grevas e escarpes de ponta arredondada, refletindo as inovações introduzidas no traje militar ao longo do século XV. Completa a sua indumentária uma ampla capa vermelha com capuz presa no peito por um broche romboidal de ourivesaria, sob a qual se esconde o braço esquerdo carregando um escudo oblongo decorado com as iniciais Q.S.D., alusivas à sua preeminência entre os anjos, já que constituem a abreviatura da frase latina Quis sicut Deus (Quem é como Deus ou Aquele que é como Deus), enquanto o braço direito mantém-se livre para empunhar o seu outro atributo, a espada.


  Do ponto de vista estilístico, as características desta imagem remetem a modelos nórdicos do início do século XVI, apesar das lamentáveis ​​repinturas sofridas.


  A sua postura frontal rígida, descarregando o peso do corpo sobre uma das pernas e avançando a outra ligeiramente fletida, lembra a das esculturas alemãs de São Adriano (coleção particular) e São Miguel (Museu Nacional de Antiguidades de Estocolmo), mas sobretudo à estátua de São Luís, conservada na igreja de São Mateus de Meensel. Com esta última também compartilha muitas das peças integrantes da sua armadura, assim como com a escultura brabançã de São Miguel (Museu Mayer Van Den Bergh, Antuérpia), cujo tipo oferece maiores semelhanças até na ornamentação das joelheiras, sem esquecer a atitude similar do diabo estendendo as patas dianteiras envoltas em estilizadas asas de quiróptero para se agarrar ao Arcanjo com as suas garras.

Da mesma forma, o tratamento peculiar de seu cabelo em finas madeixas separadas por rítmicas estrias onduladas coincide com o de outras obras dos antigos Países Baixos meridionais datadas por volta de 1520-25, entre as quais o São Martinho da igreja do seu título em Tielt e o dos Museus Reais de Belas Artes de Bruxelas. Tais afinidades, portanto, confirmam a origem brabançã do Padroeiro de Tazacorte e permitem que seja datado por volta da segunda década daquele século.


  “A Ilustre Câmara Municipal da Vila e Porto de Tazacorte, em sessão plenária realizada a 29 de setembro de 2007, concorda nomear São Miguel Arcanjo, padroeiro do município e da Ilha de San Miguel de la Palma, presidente honorário e perpétuo da Câmara Municipal da Vila e Porto de Tazacorte, representado na imagem que se venera na paróquia do mesmo nome deste município.”









IMAGEN DE SAN MIGUEL (en français)

IMAGE DE SAN MIGUEL

Le 29 septembre 1492, le lieutenant de milice, D. Alonso Fernández de Lugo, débarqua sur les rives de Tazacorte, il choisit la Saint-Michel comme la sainte préférée d'Isabelle I. L'adelantado rencontra les rois de l'île dans le Valle de Aridane et a déclaré: "Je Alonso Fernández de Lugo au nom du pape Alexandre VI et de leurs Majestés les rois de Castille D. Fernando II et Dª Isabel I a conquis cette île en l'appelant San Miguel de La Palma." Sous le dévouement de San Miguel, le premier ermitage de l'île avait été érigé en l'honneur du Saint.

 

La Villa et le Port de Tazacorte ont été le premier endroit où le Saint Archange était vénéré sur l'île. Cette ville le garde comme patron et propriétaire de la paroisse, avec Nª Sª del Carmen. "L'ermitage de San Pedro Apóstol (Argual), celui de la Nª Sª de las Angustias et celui de San Miguel à Tazacorte, ont été construits par les seigneurs des domaines sucriers et des sucreries, qui en avaient la propriété, comme privilège intrinsèque à sa position socio-étatique. Tous avaient à l'origine des caractéristiques similaires, de sorte que le plus ancien des trois, celui de San Miguel, a peut-être servi de modèle aux derniers.

 

Ce type d'ermitage, avec des caractéristiques spécifiques dans l'architecture religieuse des palmiers, remonte aux premières années de la colonisation castillane et, d'une part, combinait la tradition mudéjar hispano-musulmane avec des formes importées peut-être des Pays-Bas.

 

Contrairement aux ermitages traditionnels de l'île, avec une porte principale, un balcon et un clocher supérieur sur le même axe vertical, ils avaient une façade principale terminée par un pignon triangulaire, formé par les deux pentes du toit, et un petit beffroi pour la cloche unique sur l'un des les coins. À l'heure actuelle, seul l'ermitage de San Pedro conserve cette disposition originale. En 1513, lorsque Jácome de Monteverde arriva à La Palma pour gérer ses domaines sucriers, il trouva au milieu de ses champs de canne à sucre une église que dezia Sant Miguel, qui à cette époque était très ancienne et démolie, car ce n'était pas en vain qu'elle avait été la premier qui a été construit sur cette île.

 

Afin que la dédicace de saint Jácome de Monteverde ne soit pas perdue, il a commencé la construction d'une autre église, qu'il a payé pour les fondations en utilisant ses propres esclaves et bœufs. L'usine réalisée alors, apparemment sous la licence de Mgr Don Frenando Vázquez de Arce, était déjà terminée le 13 décembre 1522.

 

L'église a été agrandie au milieu du siècle dernier, car elle était insuffisante pour ses paroissiens lorsqu'elle est passée à la catégorie des paroisses, lorsqu'elle a été démembrée de celle de Nuestra Señora de los Remedios de Los Llanos de Aridane en 1920, ajoutant malheureusement une nef latérale.


"L'Iltre. La mairie et le port de Tazacorte, en séance plénière tenue le 29 septembre 2007, conviennent de nommer saint Michel Archange Patron de la municipalité et de l'île de San Miguel de La Palma MAIRE HONORAIRE ET PERPÉTUEL DE LA VILLA ET DU PORT DE TAZACORTE représentés dans le image qui est vénérée dans la paroisse du même nom de cette municipalité ».







IMAGEN DE SAN MIGUEL (in italiano)

IMMAGINE DI SAN MIGUEL

Il 29 settembre 1492, il tenente della milizia D. Alonso Fernández de Lugo, sbarcato sulle rive del Tazacorte, scelse il giorno di San Michele come santo preferito di Isabella I. L'Adelantado incontrò i re dell'isola nel Valle de Aridane e disse: "I Alonso Fernández de Lugo per conto di Papa Alessandro VI e delle loro Maestà i re di Castiglia D. Fernando II e Isabella I conquistarono quest'isola chiamandola San Miguel de La Palma." Sotto la dedicazione di San Miguel, il primo eremo sull'isola era stato eretto in onore del Santo.

La Villa e il porto di Tazacorte furono il primo luogo in cui il Santo Arcangelo fu venerato sull'isola. Questa città lo mantiene come patrono e proprietario della parrocchia, insieme alla Nª Sª del Carmen. “Sia l'eremo di San Pedro Apóstol (Argual), quello della Nª Sª de las Angustias che quello di San Miguel in Tazacorte, furono costruiti dai signori delle tenute di zucchero e degli zuccherifici, che li avevano come propri, come un privilegio intrinseco alla sua posizione socio-statale. Tutti originariamente avevano caratteristiche simili, tanto che il più antico dei tre, quello di San Miguel, probabilmente servì da modello per quelli successivi.

Questo tipo di eremo, con caratteristiche specifiche all'interno dell'architettura religiosa delle palme, risale ai primi anni della colonizzazione castigliana e, da un lato, combinava la tradizione ispano-musulmana mudéjar con forme importate forse dai Paesi Bassi.

A differenza dei tradizionali eremi dell'isola, con una porta principale, un balcone e un campanile superiore sullo stesso asse verticale, avevano una facciata principale rifinita in un timpano triangolare, formato dalle due pendenze del tetto, e un piccolo campanile per la sola campana su una delle campane gli angoli. Allo stato attuale, solo l'eremo di San Pedro conserva questa sistemazione originale. Nel 1513, quando Jácome de Monteverde arrivò a La Palma per gestire le sue tenute di zucchero, trovò nel mezzo dei suoi campi di canne una chiesa che dezia Sant Miguel, che in questi tempi era molto vecchia e demolita, perché non era invano che fosse stata la prima fu costruito su quest'isola.

Per non perdere la dedica di San Giacomo di Monteverde, intraprese la costruzione di un'altra chiesa, che pagò dalle fondamenta usando i propri schiavi e buoi. La fabbrica poi eseguita, apparentemente su licenza del vescovo Don Frenando Vázquez de Arce, era già stata completata il 13 dicembre 1522.

La chiesa fu ampliata a metà del secolo scorso, poiché non era sufficiente per i suoi parrocchiani quando salì alla categoria di parrocchia, quando fu smembrata da quella di Nuestra Señora de los Remedios de Los Llanos de Aridane nel 1920, purtroppo aggiungendo una navata laterale.

"L'Iltre. Il municipio e il porto di Tazacorte, nella sessione plenaria tenutasi il 29 settembre 2007 accetta di nominare San Michele Arcangelo Patrono del comune e dell'isola di San Miguel de La Palma SINDACO ONORARIO E PERPETUO DELLA VILLA E DEL PORTO DI TAZACORTE rappresentato nella immagine che si venera nell'omonima Parrocchia di questo comune”.







IMAGEN DE IGNACIO DE AZEVEDO (em português)

IMAGEM DE INÁCIO DE AZEVEDO


  Em 1946, coincidindo com o dia de São Miguel, padroeiro de La Palma, a imprensa da ilha anunciou: "Descoberta de uma lápide na casa onde se alojaram os 40 mártires de Tazacorte". Placa de mármore que hoje é conservada no núcleo solarengo das antigas casas grandes de El Charco, também conhecido como "Hacienda de Abajo". Começa a reivindicar-se de maneira oficial por parte da câmara municipal, o clero e os vizinhos o apelativo de “Mártires de Tazacorte”. A resposta do povo tornou-se efetiva em anos posteriores com a aquisição e doação de uma imagem do beato Inácio de Azevedo.


  Sabe-se apenas de duas esculturas em madeira que são veneradas nos templos da ilha. Uma recente na ermida da Nossa Senhora de Fátima em Retamar (Los Llanos de Aridane), e a que percorre em procissão as ruas de Tazacorte cada 15 de julho. Lembre-se que em 1742, Bento XIV reconheceu solenemente o martírio e os mártires foram beatificados por Pio IX a 11 de maio de 1854.


  A escultura em madeira de Inácio de Azevedo da igreja paroquial de Tazacorte foi a primeira a ser venerada em La Palma, e hoje ocupa merecidamente um nicho no retábulo principal de São Miguel. Sabemos que foi entronizada em 1949, no que hoje é Vila e Porto, coincidindo com a erupção do vulcão San Juan e durante os festejos que "se fizeram aos beatos mártires para pedir pela extinção da erupção vulcânica". Por causa da imagem não ter chegado atempadamente para a data da festividade, a 15 de julho, a bênção e a entronização foram adiadas para 24 de julho. A escultura, da qual se desconhece a origem específica, embora suponhamos que provenha da península, foi doada pelas irmãs Orfelina e Ana Leal Rodríguez e os seus padrinhos (da imagem) Pedro e Emilia Leal Martín, sobrinhos das primeiras.


  De acordo com as referências da imprensa "a bênção teve lugar na casa dos doadores (deve ter respondido a alguma circunstância especial). Seguidamente, organizou-se a procissão da imagem venerada até ao templo, acompanhada pela banda de música e muitos fiéis. Terminada a procissão, a Santa Missa, na qual o coro paroquial interpretou magistralmente a missa a duas vozes de Perossi, dirigida pelo mestre de música Ramón Perera". Pelo menos desde março de 1949, Juan Rodríguez Cárdenas, natural de Gran Canaria, tinha sido o pároco e foi este padre que abençoou e presidiu a primeira procissão da imagem de Inácio de Azevedo desde San Borondón à igreja.


  Segundo o testemunho de Pedro Leal Martín, padrinho da imagem, as suas tias Orfelina e Ana, redigiram uma carta a quem tinha sido primeiro capelão e depois pároco de Tazacorte, Agustín Fernández de la Guerra, naquela altura residente em Cuba, para que as orientasse no desejo de fazer uma doação à paróquia. Foi esse relembrado padre que lhes disse que era necessária uma imagem do beato Inácio de Azevedo. Hoje em dia, a família Leal e os seus descendentes continuam participando na adoração e devoção aos Mártires de Tazacorte.


  Um ano antes, em 1948, há evidências da festividade e das gestões para obter uma imagem do padre Azevedo, que "num futuro próximo será abençoada e entronizada num altar ou, se possível, numa capela ainda não construída, mas que será uma realidade desde que houver esmolas suficientes". Esta capela nunca foi construída.


  Continua a notícia a dizer que, para a arrecadação de fundos, "o Sr. Cura de Tazacorte tinha aberto uma subscrição na qual tinham cabida quantas pessoas de fora da aldeia desejassem cooperar". Poucos dias antes da festividade, a 28 de junho, faleceu em Tazacorte o pároco titular de São Miguel, Julián Marco Requena, aos 73 anos de idade. Durante a sua prolongada doença, exerceu provisoriamente o sacerdócio Santiago Hernández Rodríguez. Achamos que possivelmente foi um desses dois padres que tomou a iniciativa de arrecadar fundos para adquirir a imagem de Inácio de Azevedo. O valenciano Julián Marco Requena, foi designado para a paróquia de São Miguel em 1928. Anteriormente tinha exercido o sacerdócio em Güimar e Garachico, e Santiago Hernández posteriormente serviu como pároco de Los Llanos de Aridane.


  Desconhecemos o resultado final da subscrição pública perante a notícia de 1949, já referida, da doação da imagem por Orfelina e Ana Leal Rodríguez.


  No programa festivo de 1948 (Diario de Avisos, 15 de julho de 1948), numa nota na secção "Notícias da ilha", o correspondente publicou o artigo intitulado: A próxima festa em homenagem aos "Mártires de Tazacorte". Na nossa opinião, o correspondente coloca entre aspas título como reflexo do esforço reivindicativo do qual já falámos.


  Também aponta que o antigo quadro dos Beatos Mártires sairia em procissão. A interessante resenha diz textualmente: "A festa deste ano consistirá na solene função religiosa da manhã, concertos musicais, a batalha das flores e a procissão do antigo quadro com as mencionadas relíquias, que sairão ao encontro da imagem de São Pedro, que desde domingo passado vem recebendo um fervoroso culto no bairro do Porto. "Lembre-se que São Pedro, de raízes antigas e festejos anuais em Tazacorte, recebia culto por ser o padroeiro dos pescadores, daí a sua "descida" para o bairro costeiro.


  Mais um ano rememoramos as datas da estadia e da morte violenta dos Beatos Mártires de Tazacorte. Recordemos, tal como convidou a autoridade eclesiástica no final do século XIX, "que os habitantes da ilha de La Palma se apressem para irem todos em romaria a Tazacorte no dia em que a igreja celebra a festividade destes Santos Mártires".